Cuando uno piensa que la vida te ha regalado a la persona adecuada y que solo tienes la tarea de mantenerla a tu lado y amarla cada día mas resulta imposible ver como se te escapa de las manos.
Hace exactamente dos días perdí a la mujer que amo, me miró a los ojos y me dijo… “Yo terminaría con esto”. ¿Qué se dice en esos momentos?, ¿Cómo se responde?, ¿ Cómo gritas en ese momento y le pides por favor que no se vaya sin perder la compostura?.
No lo hice, decidí no rogar, no decir nada, el alma se me partía en 2 pero decidí no hacerlo. Si a ella le parece poco todo lo que dí y todo lo que ella dio y simplemente pone en la balanza las cosas que ambas hicimos mal entonces es su problema.
Después de tomar la decisión viene lo más difícil… aceptar las consecuencias y cuáles son las consecuencias… no me tomaré el tiempo de numerarlas porque se resumen en una. ELLA ES MI VIDA!
Si bien no me voy a morir si no existe, lo mas difícil es el proceso de olvidar.
A continuación les contaré (aunque no les interese) como me va estos días mientras aprendo a vivir sin ella. De antemano gracias por escucharme o leerme, me hace bien saber que están ahí aunque no las pueda ver.
Noche 1:
Hace unas horas decidimos (en realidad decidió) que lo mejor era que las cosas se acabaran. Tiene miedo de cómo serán las cosas cuando vivamos juntas o como hubieran sido en realidad, tiene mil cosas que arreglar en su cabeza.
Estoy destrozada, no se en que pensar, no se que hacer, me llamó hace un momento y me pidió perdón. Fue raro porque no pidió perdón por haber hecho algo que no quería sino por hacerme sentir mal con su decisión.
No logro dormir, son las 2,3,4,5 de la madrugada y la cabeza solo me da vueltas, ¿ Como haré para vivir sin ella?
Nada tiene sentido ahora, comprender que sus promesas de amor eterno son mentiras, fueron mentiras y yo me las crei como una idiota. No dormí, no pegué el ojo en toda la noche y me duele la cabeza por eso.
Dia 1:
Me manda un mensaje en la mañana diciendo que las entradas para el recital donde vamos a ir ya nos la quiere, que no quiere ir… al final quedamos en vernos el jueves para ir.
Vivo todo el dia en piloto automático. Prefiero no pensar en que no está porque sino me siento peor. Pero poco a poco las cosas van tomando forma, no me siento tan sola, no puedo quedarme sentada sintiéndome mal.
Camino a la casa de una amiga, a contarle mi historia tratando de ser lo mas imparcial posible. (cosa que es posible porque siento que en realidad ambas tuvimos mucho de culpa en este rompimiento)
Noche 2:
Lo mas complicado de estos días sin ella son las noches, cuando todo se apaga, he vuelto a las pastillas para dormir, al café cargado por las mañanas y a los antojos de cigarros (prometimos no fumar porque queríamos vivir mucho para estar juntas, promesas que parecen no tener sentido ahora)
Me quebré en el teléfono… lloré mientras hablaba con ella. Me reclamo porque no debería llorar, no está bien, no debo, no debo demostrar debilidad. No, no, no.
Me dormí mientras lloraba, como cuando era niña y mi papá se iba de viaje, me quedaba sentada en la cama sintiéndome sola y perdida.
Dia 2:
Todo se siente mejor, mi cuerpo está aceptando poco a poco el dolor. En realidad, ya no duele tanto.
Llama cada cierto tiempo, me estará dando esperanzas?
Realmente me emociona escucharla en el teléfono, es como que siento que durante estos casi 3 años de estar juntas hemos forjado una excelente relación de amistad también y que ella puede contarme todo y estaré ahí siempre.
Noche 3:
En proceso, son las 11 de la noche en Lima, Perú y no sé que pasará hoy. No quiero dormir porque me siento sola. Aún no se cómo dejar de llorar en las noches. Les contaré mañana como me va durante el día.
